Quien más quien menos, ya está empezando a planificar sus vacaciones o ya las tendrá del todo planificadas. Si tenéis pensado ir a otro país, os aconsejo que añadáis a vuestro planing un poco de tiempo para vuestras aficiones:
1 buscad tiendas de manualidades en las ciudades donde vais a estar, algún momento para poderos escapar a éstas,
2 reservad parte del presupuesto para comprar en ellas: sabemos que si nos dejamos llevar por la emoción podemos causar bancarrota en la economía familiar,
3 sobretodo, mentalizar a nuestra pareja/compañeros de viaje de nuestras (caras) intenciones,
4 también podéis abusar de amigos y familiares para que os compren algún recuerdo concreto del viaje: debéis tener claro qué queréis y que la persona a la que se lo pedís es capaz de comprarlo, que para hacer devoluciones os quedará un poco lejos, las revistas son un buen recurso: buscar información de ellas en internet, concretas de pedir, no excesivamente caras (comparadas con según qué) y sin posibilidad de devolución.
Hace unos años fuí a hacer una ruta por unos pueblecitos de Holanda. En el súper mercado del pueblo había cuatro publicaciones acerca de manualidades o scrapbooking, a regañadientes, mi pareja me dejó comprar alguna... más adelante paseando encontré una tienda de scrapbooking: brutal todo lo que venden en un pueblecito! Era el segundo día de viaje y acordamos con mi pareja que no podíamos hacer tal dispendio, pero que si el último día íbamos sobrados en el presupuesto podría comprarme algunas cosillas.
En los siguientes viajes al estrangero ya le he advertido de que me pararé en quioscos y que llevo dinero específicamente guardado por si encontramos una tienda de scrapbooking por el camino.
Días después de nuestro viaje a Francia, descubrí una tienda en la misma calle donde estábamos ¡casi me tiro de los pelos! Así que este verano voy a hacer los deberes y me prepararé detenidamente los puntos que os comento.
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